Los que podamos, ¡digamos basta!
«Amenazan con poner pollera a Címar Victoria
Se calienta el ambiente político en Yapacaní, tanto que seguidores del MAS y dirigentes de la Federación Sindical de Colonizadores de Productores Agropecuarios, han anunciado que no permitirán ninguna campaña proselitista del candidato a diputado uninominal por la C 69 por el Muspa, Cimar Victoria, bajo la amenaza de ponerle pollera si es visto en alguna comunidad. Hasta el momento, Victoria no realizó ninguna concentración para proclamar su candidatura, pero tiene propaganda electoral en los medios de comunicación local, a excepción de la radio y Tv comunitaria de los colonizadores.»
«La violencia mancha la campaña en Santa Cruz
Intolerancia. Estudiantes de la Uagrm y un grupo de masistas se enfrentaron en los alrededores de la ‘U’. Para el acto estaba invitado el Vicepresidente. Hubo heridos y destrozos en el campus. No hay detenidos. Un enfrentamiento con piedras y palos entre grupos de choque del MAS y jóvenes estudiantes de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, que impidieron la realización de un acto político del partido gobernante, causó anoche cinco heridos y daños materiales de consideración.»
1 comentario
Ya ves, Carlos Hugo, más de lo mismo: poner pollera a un cadidato indeseado ¿no es otra muestra de aquello por lo que protesto?
Ahora (y hace mucho, probablemente desde siempre, ya fui testiga de actos similares en el Chapare)resulta que poner pollera a un varón significa denigrarlo, cuando la pollera es uno de los mayores símbolos del orgullo de las mujeres bolivianas, de las cholas y de las indígenas. La pollera es lo que las identifica, es su expresión de rebeldía, simboliza su presencia desafiante ante el poder colonial.
Si no les cae bien el candidato, que debatan con él, que le muestren sus equívocos, si cabe, incluso que le pongan orejas de burro, pero ponerle pollera dice mal de quien la pone o amenaza con ponerla y dice peor de quien la presta para esos propósitos.
Saludos,
Jenny Ybarnegaray