Bolivia necesita resucitar estos nombres, ritmos y decires que tienen los colores de las naciones que pueblan su geografía; ellos, además, están hambrientos, deseosos y ocurrentes de ser parte de la fiesta.
Tomate un tiempo de paz y pasea por nuestra historia transformada en música. Estoy descubriendo que existen artistas que están investigando el alma de nuestros pueblos expresada en compases…
Maraca Mateo!