Hay una historia junto al nombre de Jesús Romero como luchador por la democracia, y que ha conseguido que Tarija sea el único lugar en el mundo donde se toma vino por metros; el líquido que sale de un surtidor es el vino y mas de uno se sorprende al ver cómo ese artefacto, a través de una manguera especial, expide el producto estrella en Tarija hecho en base al cultivo ecológico de uva. El lugar es un museo que cuenta con un sin número de elementos antiguos que asombra a los visitantes. Máquinas de escribir, calculadoras, computadoras, teléfonos, radios, cuadros, balanzas, restos fósiles, cueros, rifles, pistolas, machetes y todo tipo de artesanía. “Es un encuentro con el pasado en un museo que se divide en cinco partes, etnografía, antología, paleontología, naturaleza y vinos.»
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